Mesa de la Ría pone a José Pablo entre la espada y la pared
Defendía el filósofo existencialista francés Jean Paul Sartre que “estamos condenados a ser libres”, sentencia con la que resumía el gran dilema que muchas veces, la mayoría, tiene el ser humano a la hora de tomar una decisión importante. Pues a José Pablo Vázquez, concejal portavoz de la Mesa de la Ría de Huelva, le ha llegado la condena de tomar una decisión importante, que le llega apenas siete meses después de inaugurar su vida política, y que lo coloca directamente entre la espada y la pared.
El edil compareció ayer para dar sus explicaciones sobre por qué el pasado 30 de diciembre presentó su dimisión como presidente del Comité Ejecutivo de la MRH. Sin entrar en grandes detalles, leyendo un comunicado y respondiendo de manera no muy concreta a una lluvia de preguntas de los periodistas, José Pablo quiso poner en valor el trabajo que hasta ahora ha llevado a cabo en el Ayuntamiento de Huelva: “No voy a permitir que quede ninguna duda sobre la honestidad de un trabajo, en estos meses como concejal, que han supuesto una visualización de nuestras propuestas, basadas siempre en un modelo de ciudad y recogidas en el programa electoral con el que concurrimos a las elecciones”, leyó el todavía concejal de la MRH.
Vázquez, con una explicación más cercana a la pataleta que a la argumentación sólida, valoró que el anterior Comité Ejecutivo, que él presidía, tomó “decisiones precipitadas”, ya que “no se me comunicó los puntos del orden del día” así como “mis circunstancias personales no se tuvieron en cuenta”, refiriéndose al estado de salud delicado por el que pasó el pasado mes, cuando se sometió una operación.
Las condiciones aprobadas en la asamblea
En su comparencecia de ayer, Vázquez aseguró que se sentía “respaldado por muchísimas personas”. Pero ese respaldo no parece que llegue desde su formación. Y es que la asamblea celebrada el pasado lunes 9 de enero (a la que José Pablo no acudió, según él, “porque no quiero crear la más mínima tensión”) aprobó con los votos a favor de todos sus miembros, salvo una abstención, dar un ultimátum de diez días a partir del día de ayer, en el que Vázquez recibió el acta, para que el edil “recapacite sobre su decisión y reconsidere algunas de las medidas tomadas de forma unilateral”. ¿Recapacitará? “Si tomo una decisión no es para echarme atrás”, respondió José Pablo Vázquez, quien defendió “seguir creyendo en el proyecto” de la MRH y explicó que “voy a trabajar con todas las personas que crean en este movimiento”. Pues para seguir en este movimiento, tendrá que acatar las siguientes condiciones marcadas por la asamblea de MRH, partido del que es el afiliado número 1: “Aportar parte de su sueldo al partido para contribuir a la realización de acciones que ayuden al cumplimiento de nuestro programa electoral y repercutan en la sociedad onubense”. A este respecto, Francisco Romero, portavoz del Comité Ejecutivo de MRH, aclaró que “la reducción de sueldo de los concejales también venía en el programa electoral, cosa que no ha cumplido ni ha presentado una moción al respecto”. Siguiente condición, destitución de Yolanda Cabezas, actual asesora de Vázquez, y nombramiento de nuevos asesores: “No estamos contentos con el trabajo que Yolanda Cabezas está haciendo, está llevando a cabo funciones que no le competen y está tomando un exceso de protagonismo”, explicó Romero. Y tercera, “potenciar la participación del partido en la labor del Ayuntamiento a través de la coordinación con el Comité Ejecutivo y la asamblea”.
José Pablo ha de tomar una decisión. Él asegura que “no contemplo la posibilidad de que me expulsen del partido”. Pero el acta de la asamblea es clara y tajante y si no acepta sus condiciones, adiós a Mesa de la Ría, y si cumple lo que aseguró ayer a Viva Huelva, adiós a la concejalía porque “no voy a trabajar como concejal no adscrito”.
El edil compareció ayer para dar sus explicaciones sobre por qué el pasado 30 de diciembre presentó su dimisión como presidente del Comité Ejecutivo de la MRH. Sin entrar en grandes detalles, leyendo un comunicado y respondiendo de manera no muy concreta a una lluvia de preguntas de los periodistas, José Pablo quiso poner en valor el trabajo que hasta ahora ha llevado a cabo en el Ayuntamiento de Huelva: “No voy a permitir que quede ninguna duda sobre la honestidad de un trabajo, en estos meses como concejal, que han supuesto una visualización de nuestras propuestas, basadas siempre en un modelo de ciudad y recogidas en el programa electoral con el que concurrimos a las elecciones”, leyó el todavía concejal de la MRH.
Vázquez, con una explicación más cercana a la pataleta que a la argumentación sólida, valoró que el anterior Comité Ejecutivo, que él presidía, tomó “decisiones precipitadas”, ya que “no se me comunicó los puntos del orden del día” así como “mis circunstancias personales no se tuvieron en cuenta”, refiriéndose al estado de salud delicado por el que pasó el pasado mes, cuando se sometió una operación.
Las condiciones aprobadas en la asamblea
En su comparencecia de ayer, Vázquez aseguró que se sentía “respaldado por muchísimas personas”. Pero ese respaldo no parece que llegue desde su formación. Y es que la asamblea celebrada el pasado lunes 9 de enero (a la que José Pablo no acudió, según él, “porque no quiero crear la más mínima tensión”) aprobó con los votos a favor de todos sus miembros, salvo una abstención, dar un ultimátum de diez días a partir del día de ayer, en el que Vázquez recibió el acta, para que el edil “recapacite sobre su decisión y reconsidere algunas de las medidas tomadas de forma unilateral”. ¿Recapacitará? “Si tomo una decisión no es para echarme atrás”, respondió José Pablo Vázquez, quien defendió “seguir creyendo en el proyecto” de la MRH y explicó que “voy a trabajar con todas las personas que crean en este movimiento”. Pues para seguir en este movimiento, tendrá que acatar las siguientes condiciones marcadas por la asamblea de MRH, partido del que es el afiliado número 1: “Aportar parte de su sueldo al partido para contribuir a la realización de acciones que ayuden al cumplimiento de nuestro programa electoral y repercutan en la sociedad onubense”. A este respecto, Francisco Romero, portavoz del Comité Ejecutivo de MRH, aclaró que “la reducción de sueldo de los concejales también venía en el programa electoral, cosa que no ha cumplido ni ha presentado una moción al respecto”. Siguiente condición, destitución de Yolanda Cabezas, actual asesora de Vázquez, y nombramiento de nuevos asesores: “No estamos contentos con el trabajo que Yolanda Cabezas está haciendo, está llevando a cabo funciones que no le competen y está tomando un exceso de protagonismo”, explicó Romero. Y tercera, “potenciar la participación del partido en la labor del Ayuntamiento a través de la coordinación con el Comité Ejecutivo y la asamblea”.
José Pablo ha de tomar una decisión. Él asegura que “no contemplo la posibilidad de que me expulsen del partido”. Pero el acta de la asamblea es clara y tajante y si no acepta sus condiciones, adiós a Mesa de la Ría, y si cumple lo que aseguró ayer a Viva Huelva, adiós a la concejalía porque “no voy a trabajar como concejal no adscrito”.
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